Argentina aguarda con tensión la decisión de la Corte de Apelaciones de Nueva York sobre el litigio por YPF, una causa que podría tener un impacto significativo en la economía nacional. El tribunal estadounidense debe resolver si mantiene la suspensión de la orden que obliga al país a entregar el 51% de las acciones de la petrolera estatal, levanta la suspensión o devuelve el caso a la jueza Loretta Preska para una revisión adicional.
Posibles escenarios y advertencias del Gobierno
El Gobierno argentino, a través del Jefe de Gabinete, Guillermo Franco, ha expresado su preocupación, afirmando que un fallo adverso sería “incumplible” para el país. Esta declaración subraya la gravedad de la situación y la potencial repercusión económica que podría acarrear una sentencia desfavorable.
Rumores de hackeo ruso y la incertidumbre del proceso
En medio de la espera, surgieron versiones sobre un supuesto hackeo ruso al sistema informático de la justicia federal estadounidense (Pacer), donde se sigue el expediente del caso YPF. Esta noticia, reportada por el New York Times, añade un elemento de incertidumbre y preocupación al proceso, generando interrogantes sobre la integridad y seguridad de la información judicial. Expertos han recordado incidentes pasados donde información confidencial de Argentina fue filtrada durante litigios con fondos buitre.
Impacto en los mercados y la bolsa
Mientras tanto, los mercados financieros argentinos han mostrado una reacción mixta. Las acciones argentinas en Wall Street experimentaron un repunte, aunque los títulos de YPF sufrieron una ligera caída. Los inversores se mantienen cautelosos a la espera de la resolución judicial, conscientes del impacto que podría tener en el valor de los activos argentinos.
El largo camino judicial y las alternativas
Este litigio se remonta a una década atrás, cuando fondos buitre adquirieron el caso con el objetivo de presionar a Argentina. El país ha apelado y continuará apelando hasta agotar todas las instancias, incluyendo la Corte Suprema de Estados Unidos, buscando una resolución favorable que proteja sus intereses soberanos.
Las tres alternativas que maneja la justicia estadounidense:
- Mantener la suspensión de la orden de entrega del 51% de las acciones.
- Levantar la suspensión, lo que obligaría a Argentina a cumplir con la orden de la jueza Preska.
- Devolver el expediente a la jueza Preska para que resuelva una medida más ordinaria.