Sebastián Vega, figura clave del básquet argentino y un referente de la diversidad sexual, celebró efusivamente su segundo título consecutivo de la Liga Nacional de Básquet con Boca Juniors. La imagen de Vega, envuelto en la bandera del orgullo LGBTQ+, recorrió las redes sociales y medios, consolidando su rol como un ícono de visibilidad en el deporte profesional.
Un compromiso que trasciende la cancha
Desde que hizo pública su orientación sexual en 2020, Vega no solo ha brillado en el ámbito deportivo, sino que también se ha dedicado a visibilizar las dificultades y los miedos que enfrentan muchos deportistas LGBTQ+.
El festejo de este último campeonato fue particularmente significativo. Tras la victoria de Boca, Vega se subió al aro, ondeando la bandera del orgullo con el apoyo incondicional de sus compañeros y equipo. Este gesto simboliza su compromiso con la causa y su valentía al mostrarse auténtico en un entorno que históricamente ha sido poco receptivo a la diversidad.
Vildoza también brilla
Además de la destacada actuación de Vega, José Vildoza, reconocido hincha de Boca, fue galardonado como el MVP de las finales. Vildoza, con una trayectoria impecable, también flameó una bandera de Boca desde lo alto, celebrando el campeonato junto a los fanáticos.
- Vildoza promedió 14.6 puntos, 5.1 rebotes y 3.6 asistencias durante la serie final.
- Su mejor partido fue el tercero, donde anotó 26 puntos.
“Estoy muy cómodo en Boca, es un gran club. Encontré un lugar donde me siento a gusto, donde recuperé mi esencia y puedo seguir creciendo”, declaró Vildoza, visiblemente emocionado por el logro.
La consagración de Boca, con figuras como Vega y Vildoza liderando el camino, no solo representa un triunfo deportivo, sino también un paso adelante en la inclusión y la visibilidad LGBTQ+ en el deporte argentino.