Alexander Bublik, el impredecible tenista kazajo, ha sido la gran figura del ATP Gstaad. Su juego, siempre una incógnita, ha deleitado al público suizo y lo ha catapultado a la final del torneo. ¿Estamos ante el nacimiento de una estrella en polvo de ladrillo?
Un camino inesperado
El año 2025 no comenzó de la mejor manera para Bublik. Una temprana eliminación en el Australian Open ante Francisco Cerúndolo parecía presagiar un futuro incierto. Sin embargo, Roland Garros 2025 marcó un punto de inflexión. Victorias contundentes ante Duckworth y Rocha, sumada a una épica remontada ante De Miñaur, demostraron su potencial. Pero fue su triunfo ante Jack Draper, con un juego vistoso y audaz, lo que realmente encendió la chispa.
La imagen de Bublik cubierto de arcilla, celebrando su victoria, se convirtió en uno de los momentos más memorables del año tenístico. A pesar de una clara derrota en cuartos de final ante Jannik Sinner, Bublik demostró su renovado interés por las canchas de arcilla.
Dominio en Gstaad
En Gstaad, Bublik confirmó su gran momento de forma. Superó a su compatriota Alexander Shevchenko en la primera ronda con un nivel impecable (6-2 6-3), demostrando que su actuación en Roland Garros no fue casualidad.
Bublik a la final
Alexander Bublik se metió en la final de Gstaad tras superar a Arthur Cazaux por 6-1 y 7-5. ¿Podrá alzar el trofeo y confirmar su buen momento en la arcilla? El mundo del tenis espera ansiosamente su próximo movimiento.
Otros torneos en la mira
Tras su participación en Gstaad, Bublik podría optar por participar en el ATP Kitzbuhel o reservarse para el ATP Toronto. Su calendario es aún incierto, pero lo que está claro es que el kazajo ha vuelto a despertar el interés del público con su juego impredecible y su renovada confianza en las canchas de arcilla.