Aumenta el recargo en las facturas de gas: ¿Quién paga el subsidio a las zonas frías?
El Gobierno nacional ha dispuesto un incremento en el impuesto que grava las facturas de gas, elevando la alícuota del 6,6% al 6,8%. Esta medida, oficializada a través de la Resolución 1253/2025 publicada en el Boletín Oficial, tiene como objetivo financiar el subsidio destinado a las zonas frías del país.
El recargo se aplicará sobre el precio del gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST), por cada metro cúbico 9.300 kcal que ingrese al sistema de ductos a lo largo del territorio nacional. En la práctica, esto significa que los usuarios finales de los servicios de gas verán reflejado este aumento en sus próximas facturas.
Es importante destacar que las empresas distribuidoras y subdistribuidoras no obtendrán ganancias ni sufrirán pérdidas como resultado de esta aplicación del recargo. De manera similar, las comercializadoras deberán aplicar y trasladar el recargo en su exacta proporción sobre el precio del gas natural adquirido en el PIST.
Este incremento, aunque aparentemente pequeño, genera preocupación en los usuarios, especialmente en un contexto económico desafiante. Se espera que el impacto en las facturas sea gradual, pero la medida ha generado debate sobre la necesidad de revisar el esquema de subsidios y buscar alternativas más eficientes y equitativas.
¿Qué implica este aumento para los usuarios?
Si bien el aumento es de apenas un 0,2%, este porcentaje impactará directamente en el monto final de la factura de gas. Los usuarios de zonas frías, que ya se benefician del subsidio, podrían ver un ligero incremento en sus pagos, aunque se espera que el subsidio continúe amortiguando el impacto total. Es crucial que los usuarios estén informados sobre este cambio y que las empresas distribuidoras brinden información clara y precisa en las facturas.
Reacciones y perspectivas
La medida ha generado diversas reacciones, desde críticas por el impacto en el bolsillo de los usuarios hasta justificaciones por la necesidad de sostener el subsidio a las zonas frías. El debate sobre la política energética y la distribución de subsidios sigue abierto, y se espera que este aumento en el impuesto reactive las discusiones sobre la eficiencia y la equidad del sistema.